Estos trastornos tienen un origen neurobiológico y corresponden al hecho que ciertas zonas del cerebro no se han desarrollado correctamente durante el periodo prenatal.
Estos trastornos corresponden a:
*la dislexia cuando se trata de la lectura,
*la disortografía para las correspondencias entre letras y sonidos,
* la dispraxia cuando están relacionados con la planificación y la coordinación de los gestos aprendidos
*la disfasia para el lenguaje oral
*la discalculia para las capacidades matemáticas.
El Método Tomatis, como juega con la plasticidad de los circuitos nerviosos implicados en el desciframiento y el análisis de los sonidos, pero también con los de la motricidad, el equilibrio y la coordinación, puede ayudar los niños a desarrollar estrategias de compensación frente a los trastornos del aprendizaje y el lenguaje. Así, si no permite erradicarlas, el Método induce sin embargo al individuo a gestionarlos y superarlos eficazmente.