Desde los años 80, numerosas investigaciones demostraron en el feto, la existencia de una vida psíquica y sensorial muy intensa. Estos datos no han hecho más que confirmar las posiciones de Tomatis relativas a la vida intrauterina, emitidas 30 años antes.
En efecto, desde los años 50, Tomatis había afirmado que la voz materna era percibida por el feto, y que esta última constituía para él una especie de esencia sonora afectiva primordial y capital para su evolución, tanto física como psíquica. Además, para Tomatis, esta voz le permitía al feto, grabar en su memoria las estructuras de base de su lengua materna, es decir sus ritmos y sus contornos entonativos.
Está claramente establecido que la madre, durante la espera de su niño, va a transmitirle toda una variedad de sus estados afectivos y emocionales, tanto positivos como negativos.
Es la razón por la cual durante este período excepcional, es muy importante que, en el plano de la comunicación, la futura madre esté en las mejores condiciones de descanso y serenidad.
Las sesiones con el oído electrónico, van a permitirle deshacerse de la angustia y del estrés que pueden invadirla, ya sea por causa de circunstancias externas difíciles que debe vivir, o por el temor al dolor asociado al parto.
No obstante, en todos los casos, es muy importante que la mujer embarazada, pueda relajarse y eliminar su angustia y su estrés, no sólo para ella, sino también, para su niño. En efecto, cuanto más una mujer sea propensa a la ansiedad y a la tensión, más dolor sentirá físicamente, transmitiéndole al mismo tiempo a su niño, estos estados emocionales negativos.
Además del hecho de luchar contra la ansiedad y prevenirse contra el dolor, las sesiones por lo tanto, van a proveer tanto relajación como dinamización. Pero van a permitir igualmente, liberar la respiración y combatir las malas posturas del cuerpo, ayudando a la futura madre a adoptar la postura más adecuada dependiendo de su conformación física. Tendrán también una acción benéfica en la regulación del sueño, así como una acción preventiva importante, en la disminución de energía, que aparece frecuentemente, después del parto.
Y finalmente, contribuirán a la evolución de las capacidades de comunicación del niño, capacidades cuyos orígenes, según Tomatis, se encuentran en esta primera relación sónica establecida en el feto, durante su vida intrauterina, con la voz materna.
En efecto, desde los años 50, Tomatis había afirmado que la voz materna era percibida por el feto, y que esta última constituía para él una especie de esencia sonora afectiva primordial y capital para su evolución, tanto física como psíquica. Además, para Tomatis, esta voz le permitía al feto, grabar en su memoria las estructuras de base de su lengua materna, es decir sus ritmos y sus contornos entonativos.
Está claramente establecido que la madre, durante la espera de su niño, va a transmitirle toda una variedad de sus estados afectivos y emocionales, tanto positivos como negativos.
Es la razón por la cual durante este período excepcional, es muy importante que, en el plano de la comunicación, la futura madre esté en las mejores condiciones de descanso y serenidad.
Las sesiones con el oído electrónico, van a permitirle deshacerse de la angustia y del estrés que pueden invadirla, ya sea por causa de circunstancias externas difíciles que debe vivir, o por el temor al dolor asociado al parto.
No obstante, en todos los casos, es muy importante que la mujer embarazada, pueda relajarse y eliminar su angustia y su estrés, no sólo para ella, sino también, para su niño. En efecto, cuanto más una mujer sea propensa a la ansiedad y a la tensión, más dolor sentirá físicamente, transmitiéndole al mismo tiempo a su niño, estos estados emocionales negativos.
Además del hecho de luchar contra la ansiedad y prevenirse contra el dolor, las sesiones por lo tanto, van a proveer tanto relajación como dinamización. Pero van a permitir igualmente, liberar la respiración y combatir las malas posturas del cuerpo, ayudando a la futura madre a adoptar la postura más adecuada dependiendo de su conformación física. Tendrán también una acción benéfica en la regulación del sueño, así como una acción preventiva importante, en la disminución de energía, que aparece frecuentemente, después del parto.
Y finalmente, contribuirán a la evolución de las capacidades de comunicación del niño, capacidades cuyos orígenes, según Tomatis, se encuentran en esta primera relación sónica establecida en el feto, durante su vida intrauterina, con la voz materna.
Efecto Tomatis: El oido electronico por raulespert